Así lo ha afirmado Lierre Keith, después de seguir una dieta vegana durante 20 años.
Esta mujer ha compartido con nosotros su punto de vista, que ha plasmado en su libro (El mito vegetariano), después de comprobar como su salud ha decaído con los años y de investigar exhaustivamente sobre el tema. Ha viajado a incontables países, observando sus dietas y comparando unos con otros.
En esta entrevista nos explica que una dieta vegana supone una destrucción del poco suelo fértil que queda en la tierra. El cultivo masivo no hace bien al planeta, y si toda la población basara su alimentación en productos solo de origen vegetal, destruiríamos el planeta.
La agricultura es lo más destructivo que las personas han hecho en el planeta- dice Keith
Cuando cultivamos algo cogemos grandes parcelas de tierra y eliminamos los microorganismos que habitan en ellas, estamos alterando la naturaleza y contaminando el suelo. Para después acabar arrancando aquello que hemos cultivado. Y volver otra vez a limpiar el suelo y cultivar. Así sucesivamente, sin parar, hasta que el suelo no es capaz de producir nada más. Hasta que lo hemos destruido. Básicamente el suelo depende de las lluvias, y si estas no se dan con frecuencia, perdemos esos 15 cm que nos mantienen a todos con vida en la superficie terrestre.
Ella nos explica que detrás de todo hay intereses políticos y económicos, que la agricultura es el principio de la esclavitud humana y del imperialismo, ya que siempre se necesitan más recursos, nunca puedes cesar de cultivar una tierra.
Los veganos creen que si todos dejáramos de comer animales arreglaríamos el mundo, y eso no es así. De ese modo estaríamos destruyendo un combustible fósil no renovable, el suelo.
Esta información puede sonarte extraña, dudosa, o crear controversia. Si aún sigues creyendo eso, te animo a que leas la entrevista completa a esta ex-vegana.
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